Muchas personas utilizan indistintamente los nombres de crema y emulsión corporal para referirse al mismo tipo de producto, sin embargo son bastante diferentes entre sí.
Emulsión corporal
Las emulsiones tienen mayor cantidad de agua en su composición y son por tanto más ligeras que las cremas. Su textura fluida se extiende fácilmente sobre la piel y se absorben rápidamente sin dejar sensación grasa. Son la opción ideal para pieles jóvenes que no necesitan una hidratación profunda. También son una buena elección para hidratar la piel en verano ya que dejan una sensación fresca y confortable tras su aplicación.
Cremas corporales
Las cremas corporales son más espesas ya que tienen menor cantidad de agua en su composición. Se absorben lentamente y resultan ideales para pieles que necesitan una hidratación más concentrada, como las pieles secas o envejecidas.
Durante el invierno la barrera hidro-lípida de la piel se debilita y esta tiende a resecarse por efecto de las calefacciones, el viento o los cambios bruscos de temperatura. Las pieles secas y maduras son las más sensibles a estos cambios pero todos los biotipos pueden verse afectados, así que la mejor forma de evitar que la piel del cuerpo se deshidrate y se vuelva propensa a la aparición de flacidez o estrías, es usar una buena crema hidratante durante los meses más fríos del año.
Fuente: somosbellas.com
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