Aumentan los casos de sarna
La sarna humana, distinta de la canina, se produce por acción de un bichito de 0,4 mm. Las hembras perforan la piel, cavan túneles y colocan allí sus huevos. Esto produce ronchas y granos con mucha picazón. La enfermedad no tiene nada que ver con la limpieza y ningún bebé, niño o adulto está exento a contraerla.
La sarna humana, distinta de la canina, se produce por acción de un bichito de 0,4 mm. Las hembras perforan la piel, cavan túneles y colocan allí sus huevos. Esto produce ronchas y granos con mucha picazón. La enfermedad no tiene nada que ver con la limpieza y ningún bebé, niño o adulto está exento a contraerla.
El dicho popular podría decir: Escabiosis con gusto, no pica. Porque escabiosis es el nombre con que se denomina formalmente a la sarna. Que tenga el nombre que tenga, pica y se ha vuelto un problema cada vez más frecuente, porque dejó de estar relacionado sólo con las familias pobres.
¿Qué la provoca?
La sarna humana -también la padecen los perros, pero esta es diferente- se trata de una enfermedad en la piel ocasionada por un parásito llamado “Sarcoptes scabiei”, y se contagia por el contacto directo con una persona afectada, o mediante las sábanas, pijamas y demás prendas de vestir infectadas. Este pequeño ácaro, que puede vivir hasta 48 horas en la ropa, y que es posible observar, a pesar de sus 0,4 milímetros de largo, actúa sobre la piel. Las hembras se fecundan fuera de la persona y luego entran por la piel, ocasionando heridas, por donde pueden ingresar otras bacterias que pueden complicar el cuadro. A medida que penetran en la piel, cavan pequeños túneles y van depositando sus huevos, de a dos o tres por día, además de unas toxinas que segregan y que causan reacciones alérgicas.
¿Cuáles son las consecuencias?
Al poco tiempo, y como síntoma del paso del bichito por el cuerpo, aparecen ronchas o granos en la superficie de la piel y estas causan gran picazón. Las zonas más vulnerables son los dedos, los espacios entre ellos, y las muñecas. La sarna también genera una reacción alérgica que se traduce en sarpullido en otras zonas del cuerpo, siendo las más habituales: la cintura, las axilas y las articulaciones. Su complejidad es tratable, por supuesto, pero para eliminarla se necesita un tratamiento específico. Si la enfermedad ya ha avanzado mucho, lo primero que debe hacerse es curar los granos y las infecciones de la piel, para después aplicar el tratamiento para matar los parásitos de la sarna. El proceso es este, ya que el tratamiento de la sarna, mediante la aplicación de lociones especiales, quema o irrita la piel, por lo tanto, la persona no resiste que le coloquen la loción si tiene alguna herida o grano en la piel. Para aliviar la picazón, es necesario ponerse aceite, calamina o alguna otra medicina recomendada por el médico.
¿La sarna se manifiesta más en determinados sectores de la sociedad?
La mayoría de los casos se dio, históricamente, en los sectores más bajos de la sociedad. Sin embargo, en los últimos tiempos, los hospitales están recibiendo casos de muchas personas de los sectores medios, lo que significa que la enfermedad se va expandiendo, y que nadie está exento a contraerla.
¿En los bebés se manifiesta en las mismas partes del cuerpo que en los adultos?
En los bebés, la mayoría de las veces se da en las manos, los pies y las axilas, y eventualmente, en el cuero cabelludo y la cara. La sarna no causa fiebre a menos que exista una infección bacteriana sobreañadida. El sarpullido no se quita, continúa indefinidamente, haciéndose más intenso y diseminado hasta que se trate adecuadamente.
Se aconseja hacer los tratamientos por la noche, con las lociones y lavando con agua y jabón las zonas afectadas. Y al día siguiente, los niños pueden volver al colegio o a la guardería. La sarna no tiene nada que ver con limpieza.
De la redacción de tvcrecer
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