Esta vacuna, de aplicación oral, es la solución al virus que infecta a los niños, causándoles diarrea. Su prevención y cura es sencilla, no obstante, cerca de 450.000 niños mueren por año debido al rotavirus.

El rotavirus es el virus principal que causa diarrea en los niños menores de cinco años. A esa edad, la gran mayoría de ellos, en todo el mundo, han sido infectados por el rotavirus al menos en una oportunidad. Sin embargo, con una nueva ^[..infección, el sistema inmunitario se refuerza y la infección es cada vez más leve. Existen cinco especies, denominadas: A, B, C, D y E. El más común es el A, causante del 90 % de las infecciones en humanos, aunque la mayoría se produce en los chicos, ya que es muy poco común que se de en un adulto. El rotavirus también afecta a los animales, fundamentalmente al ganado bovino.

La transmisión del virus es mediante la vía fecal-oral. Infecta y daña las células que recubren el intestino delgado y causa gastroenteritis. A pesar de que el rotavirus fue descubierto en 1973, aún se desconoce ampliamente, entre la comunidad de la salud pública de los países en proceso de desarrollo.

A pesar de ser una enfermedad que causa víctimas fatales (cerca de 450.000 niños mueren por año debido a esta razón), su cura es sencilla. Y consiste en ajustarse a un plan de vacunación, básicamente, a la vacuna Rotarix, que no es para suministrar a los adultos. El plan de vacunación requiere dos dosis. La primera dosis, puede administrarse a partir de  las seis semanas de vida del bebé. Y la segunda, una vez trascurrido un intervalo de al menos cuatro semanas. El esquema debe completarse al cumplir el chico las veinticuatro semanas.

Un dato significativo es que la vacuna se suministra exclusivamente por vía oral y bajo ninguna circunstancia debe inyectarse. En estudios clínicos realizados tiempo atrás, se observó muy ocasionalmente que el paciente escupía o regurgitaba la vacuna y, en estas ocasiones, no se administró una dosis de reemplazo. Sin embargo, en el caso poco probable de que el lactante escupa o regurgite la mayor parte de la dosis de vacunación, podrá administrarse una dosis única de reemplazo en la misma visita de vacunación. En estos mismos estudios se comprobó que la lactancia materna no reduce la protección frente a la gastroenteritis por rotavirus conferida por Rotarix. Por lo tanto, puede continuarse, sin inconvenientes, con la lactancia materna durante el programa de vacunación.

Las dosis de Rotarix terminan con el rotavirus. Así de sencillo. Así de contundente.

De la redacción de tvcrecer